10 reglas para no quedar grosero en Internet

LA NACION convocó a ocho especialistas del mundo digital para que dieran su visión sobre cuestiones cotidianas que generan conflictos entre los usuarios de la Red

Que el espacio virtual está lleno de hipersensibles, inoportunos y desconsiderados, no hay duda. Pero que las fricciones y ofensas por nuestro comportamiento digital las acompañan, tampoco. LA NACION convocó a ocho especialistas del mundo digital para que dieran su visión sobre diez cuestiones tan cotidianas como conflictivas entre los usuarios de la Red. Opinaron Alejandro Artopoulos, sociólogo de la tecnología y profesor de la Universidad de San Andrés; Julián Gallo, periodista y consultor en nuevos medios; Tomás Balmaceda, experto en redes sociales; Enrique Carrier, titular de la consultora especializada en tecnología; Laura Corvalán, especialista en socialmedia y community manager; Marisol de la Fuente, gerente de Marketing en una multinacional; Alejandro Tortolini, especialista en el Proyecto Aulas Interactivas de la Escuela de Educación de la Universidad de San Andrés; y Ariel Torres, periodista de LA NACION. Del consenso de sus respuestas, surgieron estas diez reglas para manejarse con corrección en la web. O al menos, para hacer el esfuerzo de intentarlo.

Leé acá los argumentos detrás de las conclusiones a las que llegaron los expertos

1. Ese mail sin responder.
Si el mail es de un conocido, al menos se lo debe contestar de forma breve en señal de que más adelante se dará una respuesta, o excusándose con un “no conozco sobre el tema” o “no es mi área”.

2. El chateador serial
Cuando un contacto irrumpe en el chat de una red social y uno no quiere conversar, es preferible, directamente, no responder antes que ponerse a dar explicaciones sobre por qué uno no quiere o no puede hacerlo.

3. Cuestión de género
“Hola a todos”, “queridos todos” y “estimados” son las formas más usuales a la hora de encabezar y saludar en un mail colectivo destinado a ambos sexos. Diferenciar entre masculino y femenino suena impostado y artificial, al igual que estimad@s o amigxs.

4. Silencio, estamos en reunión
Durante una reunión laboral los celulares deben estar en silencio. Tampoco en modo vibración porque también distrae. Mucho menos responder un mensaje o atender una llamada que puede responderse luego. Si es una urgencia, hay que atenderlo afuera.

5. Salirse del grupo
Si uno fue incluido sin permiso en un grupo de WhatsApp, vale salirse sin avisar. Si fue uno fue incluido con aviso previo, pero perdió interés, lo mejor es silenciar el grupo y seguir ahí pero sin recibir notificaciones.

6. Emoticones y trabajo
Los emoticones forman parte de la escritura digital actual, por lo que se pueden incluir tranquilamente en mensajes laborales. Eso sí: no hay que excederse.

7. El aviso de lectura y recepción
Los avisos de recepción y lectura de mails están muy mal vistos. Son propios de una sociedad de control.

8. Que los cumplas feliz
El medio para saludar por el cumpleaños se mide según el grado de relación. A los conocidos, se los puede saludar por redes sociales. Con los que tenemos un vínculo más cercano, se les manda un WhatsApp. Y a los amigos o familiares los llamamos o los vemos.

9. Mensajes de madrugada
No se puede mandar un mensaje directo por Twitter o un WhatsApp a la madrugada sólo porque al otro lo vemos conectado.

10. Posteos con preguntas
Las redes sociales son como una gran reunión: circulamos, saludamos, compartimos un rato de charla y luego nos vamos y seguimos con nuestras vidas. Por eso, hay que contestar. Sin embargo, si las preguntas son indiscretas o demasiado banales uno no está obligado a responder.

 

Fuente: La Nacion